Un reciente anuncio incluyó numerosas medidas destinadas a controlar lo que se ha convertido en una inundación incontenible de visitantes. En los últimos años, Amsterdam ha implementado medidas altamente publicitadas para combatir los problemas de turismo masivo que han afectado a la ciudad capital.

Estas iniciativas incluyen la campaña “Stay Away” de 2023 dirigida directamente a los “turistas molestos” que vienen a la ciudad específicamente por drogas o despedidas de soltero ruidosas. Una prohibición de los tours en el distrito de la luz roja entró en vigor el 1 de enero de 2020. A partir de mayo de 2023, ya no está permitido fumar marihuana en las calles de varios vecindarios. Y en julio de 2023, la ciudad votó para prohibir los cruceros en el centro de la ciudad (la ordenanza aún no ha entrado en vigor).

Sin embargo, las multitudes siguen llegando. En 2023, Amsterdam registró un asombroso total de 20,67 millones de pernoctaciones en los hoteles de la ciudad, una cifra que no incluye alquileres vacacionales, estancias en bed and breakfast ni noches de crucero. La población actual de Amsterdam es de aproximadamente 1,2 millones de residentes.

Esa afluencia de viajeros ha llevado a una nueva serie de medidas anunciadas recientemente para frenar esas cifras, siendo la más notable una regla que básicamente prohíbe la construcción de nuevos hoteles, según un comunicado reciente del ayuntamiento. Otras medidas incluyen reducir a la mitad el número de amarres para cruceros fluviales por año, de 2,300 a 1,150 en los próximos cinco años.

Estas iniciativas forman parte de numerosos esfuerzos que los funcionarios de la ciudad están haciendo en un esfuerzo continuo para controlar los problemas de sobreturismo, según informes de DutchNews y otros medios de comunicación. La nueva iniciativa hotelera, que refuerza la política existente de la ciudad establecida en 2017, tiene algunas exenciones.

Especialmente, no se aplica a los hoteles futuros que ya hayan obtenido un permiso (actualmente, hay 26 proyectos en curso, según el comunicado de la ciudad). Además, un nuevo hotel solo puede abrirse si otro cierra, y la nueva propiedad no puede alojar a más huéspedes de los que podía alojar su predecesor y debe operar de manera más sostenible que el hotel que reemplaza.

Estas medidas recientemente anunciadas forman parte de un plan mucho más amplio para combatir el turismo masivo y mejorar la imagen de la ciudad como una más centrada en las artes y la cultura en lugar de en los vicios. En julio de 2021, el ayuntamiento aprobó una ordenanza llamada “Turismo en equilibrio en Amsterdam”, que establece un límite de 20 millones de visitantes por año, incluidas las pernoctaciones y las visitas diurnas. Una vez que el número de visitantes alcance los 18 millones anuales, la ciudad está obligada a intervenir con medidas adicionales en línea con las que ha implementado recientemente.